Diani beach


Antes de las 8:00 nos bañamos en la piscina y desayunamos.
Jessy, la dueña, nos lleva en coche hasta un bar famoso de la zona, Forties Thieves, donde nos tomamos un café.
Emili y Serge se van a bañar con las caretas (gafas de buceo) y Kati se queda en la orilla cuidando las pertenencias y atendiendo a todo aquél que se acerca a su lado.
Primero le ofrecen una excursión a una islita donde bucear. Después un señor con mirada cansada y triste le da conversación y le intenta vender algún coco, Viernes se hacía llamar.
Los masai le ofrecían pulseras y collares.
Una blanquita joven le pide que si, por favor, le cuida su mochila en lo que ella se va a dar un baño a la playa ya que para una viajante solitaria es difícil hacerlo.
Después de una hora llegan los delfines Emili y Serge (así los denomina el amigo de Kati que le ofreció la excursión).
Por la playa posan y pasean humanos y animales de todos los tipos, camellos incluidos.
Camellos en la playa
Comemos en el Nomad, pizza y sushi.
Acróbatas nos amenizan la comida en Diani Beach
Paseamos por el bosque hasta el apartamento, chozo de ricos y disfrutamos de un buen baño en la piscina.
Kati descansa pues le duele la cabeza. 
Cogemos un tuk tuk y volvemos al Forties Thieves donde Emili y Serge cenan. Kati tiene el estómago revuelto y solo bebe.
Regresamos sobre las 22:00 a nuestra casita y descansamos.

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